¿Cuáles son las características de un scooter deportivo?
Un scooter deportivo es un vehículo clasificado dentro de las motocicletas que cuenta con características propias y que destaca por ofrecer al conductor una modalidad de viaje más polivalente y entusiasta.
Elementos principales
Son muchos los elementos que configuran esta tipología, pero entre todos ellos merecen especial mención algunos de ellos. Así, por ejemplo, cuentan con un chasis continuo, una plataforma de reposapiés y una horquilla diseñada para facilitar una conducción más cómoda. Igualmente, destaca su cilindrada, que evoluciona desde los 125cc, siendo capaz de asimilar una gran capacidad de carga: desde el casco integral, hasta todos los factores que configuran su diseño y ergonomía.
Transmisión y neumáticos
Generalmente nos encontraremos con transmisiones que combinan lo automático, con lo manual. No obstante, resulta una realidad que el usuario de esta gama se inclinará siempre por un modelo más automático. Gracias a este factor, se posicionan en su segmento como vehículos de bajo consumo, a pesar de contar con una gran capacidad en sus depósitos de combustible.
Las ruedas son otra de las grandes particularidades de las scooters, ya que cuentan con unas llantas de gran diámetro que favorecen la estabilidad en carretera. Los amantes de esta modalidad valoran mucho el hecho de conseguir grandes dosis de adrenalina en toda seguridad. A diferencia de lo que ocurre en otros casos, aquí nos encontramos con una fusión perfecta de deportividad y firmeza. Puedes acelerar tranquilo, porque, gracias a la gran adherencia de esta tipología de rueda, la parte trasera no se ladeará, ni perderás el control. Dicho fácil: la firma de una gran performance al alcance de tu mano.
Avance de ingeniería
Cuando describimos su equipamiento, destacamos la incorporación de luces LED y otros elementos estéticos. Sin embargo, es destacable la incorporación de una pantalla cada vez más sofisticada en el panel de control que, gracias a la mejora de la tecnología disponible para su fabricación, ahora hace posible tener controlados todos los parámetros, indicadores, medias y rendimientos en viaje.
Esto nos ayuda a la hora de realizar el mantenimiento anual, pasar la ITV, llevar un control del consumo de combustible o disfrutar de las revoluciones y el velocímetro a otro nivel. Se incorpora así un elemento fundamental a nuestro día a día, una nueva versión de pantallas que han sido ideadas para facilitarnos todo lo relacionado con el buen funcionamiento de nuestra moto.
Potencia y sistema de frenado
La mayoría de usuarios busca combinar las sensaciones fuertes que consiguen al introducir la llave y apretar el puño de su moto, con la tranquilidad absoluta de un excelente diseño de frenos. En este sentido, las diferentes cilindradas cuentan con un freno basado en pinzas radiales de última generación, capaces de reducir la velocidad drásticamente en los neumáticos delanteros y traseros sin hacer perder el equilibrio al conductor. Así se puede alternar un paso más urbanita, con uno más sport, para volver a la calma nuevamente. Algo que solo esta serie puede garantizarte en el mercado actual.
Un motor optimizado
En esta categoría de motos, la refrigeración líquida se ha impuesto como la norma a la hora de garantizar el máximo rendimiento de los motores. Anteriormente era normal ver algún modelo que incluía refrigeración por aire, pero esta es una práctica que cada vez más está cayendo en desuso. Así, por ejemplo, sería raro ver una Tmax utilizando esta metodología en la actualidad.
Normativa vigente
Para poder disfrutar de todas las sensaciones que proporciona su conducción, debemos de tener claro las diferentes modalidades de carnet que existen hoy día en la legislación vial. No se trata tanto de una cuestión de cc (centímetros cúbicos del motor), como de cv (potencia en caballos del motor). Así, la diferencia fundamental entre los niveles A1, A2, A y AM, tiene en cuenta las diferentes cilindradas que se autoriza a conducir, pero, a excepción del A1, en todos los casos juega un papel crucial el número de caballos que puedes disfrutar bajo el puño de tu acelerador.